Mi pelicula de acción y entretenimiento de cabecera (7).
Reconozco que esta película no es ninguna maravilla, es más, diría que es de una tontuna supina, parte de una base trillada para desarrollar un argumento bastante previsible siguiendo todos lo cánones del cine de acción con un antihéroe como protagonista que termina salvando el mundo.
Como película que pertenece a este género tan comercial tiene todos los defectos que se le pueden achacar, es decir, poco realista y con una definición pobre de los personajes, es decir, ya se parte de una base donde no habrá ni grandes reflexiones ni gran rigor y que la historia será total y completamente previsible, pero una vez asumido todo esto, una vez tienes tan claro lo que te vas a encontrar sólo te queda una cosa por hacer, preparar tus palomitas, acomodar tu culo lo mejor posible en el sofá y asistir a dos horas de espectáculo frenético, chistes fáciles, pero resultones, explosiones, chicas 10 y final con suspense e intriga (sic) hasta el último suspiro.
Una vez dicho todo esto, sólo queda por resolver la incógnita de porque ésta se lleva un 7 y no un 6 como la mayoría de películas de mero entretenimiento diseñadas para pasar un sábado por la tarde que no tienes ganas de exprimirte el seso y que cumplen con su cometido. Pues simplemente porque, en mi opinión, las virtudes que tienen estos productos, escasas, pero tremendamente disfrutables, en este producto rozan el máximo exponente, es decir, las interpretaciones a pesar de lo plano de todo el asunto resultan más convincentes, el ritmo es más vibrante, los chistes tampoco desentonan y aparece Anthony Hopkins, que casi siempre es garantía de calidad.
En definitiva, uno de los máximos exponentes del cine palomitero, vedla sin grandes expectativas y os encontraréis con dos horas de diversión garantizada.
Como película que pertenece a este género tan comercial tiene todos los defectos que se le pueden achacar, es decir, poco realista y con una definición pobre de los personajes, es decir, ya se parte de una base donde no habrá ni grandes reflexiones ni gran rigor y que la historia será total y completamente previsible, pero una vez asumido todo esto, una vez tienes tan claro lo que te vas a encontrar sólo te queda una cosa por hacer, preparar tus palomitas, acomodar tu culo lo mejor posible en el sofá y asistir a dos horas de espectáculo frenético, chistes fáciles, pero resultones, explosiones, chicas 10 y final con suspense e intriga (sic) hasta el último suspiro.
Una vez dicho todo esto, sólo queda por resolver la incógnita de porque ésta se lleva un 7 y no un 6 como la mayoría de películas de mero entretenimiento diseñadas para pasar un sábado por la tarde que no tienes ganas de exprimirte el seso y que cumplen con su cometido. Pues simplemente porque, en mi opinión, las virtudes que tienen estos productos, escasas, pero tremendamente disfrutables, en este producto rozan el máximo exponente, es decir, las interpretaciones a pesar de lo plano de todo el asunto resultan más convincentes, el ritmo es más vibrante, los chistes tampoco desentonan y aparece Anthony Hopkins, que casi siempre es garantía de calidad.
En definitiva, uno de los máximos exponentes del cine palomitero, vedla sin grandes expectativas y os encontraréis con dos horas de diversión garantizada.
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