The Wrestler

El ídolo y el antihéroe (8).

Una historia aséptica, despojada de virtuosismos vacuos, una película que no parece de Aronofsky, y no voy a decir que eso sea necesariamente malo, Pi es una excelente película, pero lo cierto es que esta historia lo agradece.

Una narración cruda de la vida de alguien que en un momento de su vida fue un ídolo, pero que el tiempo convierte en un fracasado que vive anclado en ese pasado glorioso. Un hombre que quiere seguir adelante haciendo lo que ha hecho toda su vida, lo único que cree saber hacer, lo único para lo que vale. Un hombre que pese a ser la sombra de lo que fue, vive aferrado a su pasado, creyendo que esa es su única alternativa para poder seguir viviendo, para que merezca la pena seguir viviendo. Sólo un hecho de fuerza mayor le obliga a replantearse esa vida, y cuando lo hace descubre que está solo, que reconstruir lo que ha perdido por el camino, lo que ha dejado que se marchite no es tan fácil. Ve los errores que ha cometido, los errores que aunque no quiera vuelve a cometer. Consigue ver esperanza en su hija, se hace ilusiones con la posibilidad de reconstruir su vida al lado de una stripper que también vive atrapada en un mundo que quiere abandonar, y termina por darse cuenta, que por mucho que lo desee, quizá él sólo ha nacido para una cosa, luchar.

Un radiografia del mundo de wrestling, del espectáulo de cartón piedra que es, de lo que hay detrás, y de lo que sucede con alguna de sus figuras. Randy es un personaje entrañable, Rourke hace un papelón, Tomei cumple y alegra la vista, y al final te quedas con la sensación de haber visto un pedacito de cruda realidad que termina con un final redondo, abierto, donde la esperanza o falta de ella queda a gusto del espectador.

Una película que quizá no se pueda alabar por su originalidad, las historias de fracasados es uno de los temas más recurrentes de la historia del cine y la literatura. Una historia que hasta un cierto punto sigue una pauta perfectamente establecida, pero aún a pesar de no rehuir ciertos lugares comunes (la familia desestructurada, la soledad, la mirada al pasado) si evita algunos convencionalismos (el desenlace, la solución al conflicto...) emociona, llega y te hace pensar.

La mejor película de Darren.

1 comentario:

Pirrimarzon dijo...

Hola Simpkins

Como dices, es una historia del fracaso personal de dos vidas paralelas (no sólo la de Rourke) y lo cierto es que engancha y emociona.

Por la parte que me toca, me gustaría destacar la banda sonora, con muchos temas ochenteros muy de mi gusto (Ratt, Cinderella, Scorpions, Firehouse...)

Saludos