La mejor serie de lo que llevamos de siglo (9).
Muy posiblemente la mejor serie de lo que llevamos de siglo, realmente adictiva, muy sólida, tensa y capaz de mantener un interés constante por parte del espectador gracias a las múltiples tramas individuales.
Posiblemente lo mejor de todo son los personajes, algo básico en cualquier serie, ya que para que alguién se enganche a un producto de estas características tienen que llegarle los personajes, y en este aspecto debe admitirse que el trabajo de cásting y guión a la hora de desarroyarlos ha sido excepcional, hay personajes para todos los gustos, y aunque pueda parecer que algunos están estereotipados, a medida que avanza la historia te das cuenta que todos son más complejos y humanos de lo que en un principio se podría pensar.
Otro gran acierto de la serie es la estructura en flashbacks que nos va presentando de forma paulatina el perfil de los personajes, nos ayudan a entender su comportamiento y reacciones, pero, además, resultan tan entretenidas como la trama principal y, posiblemente, debido a su estructura más acotada, sean más sólidas que la historia de la isla, sin fisuras y muy bien hiladas en el momento de su cruce entre ellas antes de subir al avión, de modo que no sólo son creibles y atractivas des de su perspectiva individual e independiente si no que funcionan perfectamente como conductoras de la trama posterior, pero sobre todo anterior al accidente.
Este último punto influye en la que es la mayor virud de la serie, es decir, el hecho de mantener un interes constante, alto e intrigante durante todos y cada uno de sus episodios, pero también condiciona el que para mi es el único defecto, menor en mi opinión, de la misma, y es que no puedo evitar la sensación de que la trama principal avanza quizá más lento de lo que debería, de modo que en algunos capítulos a veces se descubre poco, o casi nada, de lo que sucede en la isla, aunque por suerte estos capítulos acostumbran a ser los que mejores historias paralelas tienen.
En definitiva, una gran serie, entretenida, interesante, tensa, con buenos actores y que, con casi total seguridad, si le das una oportunidad te atrapará casi irremediablemente des del piloto.
Posiblemente lo mejor de todo son los personajes, algo básico en cualquier serie, ya que para que alguién se enganche a un producto de estas características tienen que llegarle los personajes, y en este aspecto debe admitirse que el trabajo de cásting y guión a la hora de desarroyarlos ha sido excepcional, hay personajes para todos los gustos, y aunque pueda parecer que algunos están estereotipados, a medida que avanza la historia te das cuenta que todos son más complejos y humanos de lo que en un principio se podría pensar.
Otro gran acierto de la serie es la estructura en flashbacks que nos va presentando de forma paulatina el perfil de los personajes, nos ayudan a entender su comportamiento y reacciones, pero, además, resultan tan entretenidas como la trama principal y, posiblemente, debido a su estructura más acotada, sean más sólidas que la historia de la isla, sin fisuras y muy bien hiladas en el momento de su cruce entre ellas antes de subir al avión, de modo que no sólo son creibles y atractivas des de su perspectiva individual e independiente si no que funcionan perfectamente como conductoras de la trama posterior, pero sobre todo anterior al accidente.
Este último punto influye en la que es la mayor virud de la serie, es decir, el hecho de mantener un interes constante, alto e intrigante durante todos y cada uno de sus episodios, pero también condiciona el que para mi es el único defecto, menor en mi opinión, de la misma, y es que no puedo evitar la sensación de que la trama principal avanza quizá más lento de lo que debería, de modo que en algunos capítulos a veces se descubre poco, o casi nada, de lo que sucede en la isla, aunque por suerte estos capítulos acostumbran a ser los que mejores historias paralelas tienen.
En definitiva, una gran serie, entretenida, interesante, tensa, con buenos actores y que, con casi total seguridad, si le das una oportunidad te atrapará casi irremediablemente des del piloto.
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